Ha sido para mi un gran placer y al mismo tiempo un gran honor recibir el prestigioso Premio Pepe Carvalho de novela negra instituido por el Ayuntamiento de Barcelona en memoria del personaje más popular de la obra de Manuel Vázquez Montalbán. Me hubiera gustado mucho haber podido estar personalmente aquí con todos vosotros, no solo porque me encantaría volver a ver a los amigos que tengo en España, incluidos a mis editores, Ediciones B, sino también porque nadie puede dejar de visitar una de las ciudades más bonitas y más interesantes de Europa sin sentir una gran emoción. Es un honor para un escritor recibir un premio que rinde homenaje a Manuel Vázquez Montalbán, y espero no ser muy presuntuosa si digo que creo que, como escritores, tenemos mucho en común, no solamente por haber creado un detective conocido en todo el mundo, sino porque mantenemos las mejores tradiciones de nuestro oficio, escribiendo libros que sirven para dar placer a millones de personas, al mismo tiempo que reivindicamos ser considerados escritores de literatura seria. La novela de detectives se puede escribir, principalmente, para proporcionar placer al lector, emoción, y ser al mismo tiempo un rompecabezas _ todos estos son objetivos valiosos, porque la literatura debe hacerse para disfrutar de ella_, pero quizás su principal mérito, el mayor logro de las mejores novelas de detectives es el de emplear una formula popular para el mayor de los misterios: el del alma humana. Agradezco al alcalde, a todos los miembros del jurado de este premio y al Ayuntamiento de Barcelona el honor del que he sido merecedora y solo lamento no poder estar con todos vosotros para daros personalmente las gracias y poder visitar de nuevo vuestra hermosa ciudad.
P. D. James.
No hay comentarios:
Publicar un comentario