13 julio 2010

La muerte tenía figura de mujer hermosa/ Andrés Fornells


Para conseguir su único y fatídico objetivo, que es el de segar vidas, la muerte utiliza los más variados disfraces. De todos ellos, uno de los más efectivos es el de la belleza, pues con este disfraz fascina a sus víctimas y éstas se le rinden incondicionalmente sin sospechar las fatales consecuencias que tendrá su rendición.
En esta nueva novela de Andrés Fornells, que transcurre entre personas de la alta sociedad, hoteles conocidos y jeques árabes, encontramos a la mafia que no perdona, a un jefe de policía brutal que abusa de su autoridad, a una muchacha que hace del amor su razón de vivir, a un aventurero maltratado por la vida, a una mujer bella, lasciva y despiadada profesional del crimen, a un viejo lobo de mar que lo ha visto y vivido todo, a un rico magnate y a su vicioso hijo. Y como escenario de buena parte de este apasionante libro, Marbella, Puerto Banús, lujoso refugio para los yates más grandes y fastuosos del mundo y también de sus acaudalados propietarios, que en ocasiones ocultan tras el lujo sórdidas historias.



La mujer tenía figura de mujer hermosa
Andrés Fornells
Irreverentes 2010

3 comentarios:

el cartero dijo...

hola alejandro, te encontré por casualidad ¡me alegro¡.
soy nieves, te das cuenta?, socia de cauce. nos vimos la última vez cuando vino andreu martín.

mañana miércoles estaré en gijón, probablemente hasta el sábado. además de disfrutas unos días de mi madre, me gustaría ir a la semana negra.
podrías recomendarme alguna presentación, autores, y demás, interesante?

gracias.
un abrazo

pd: ojalá puedas contestarmme hoy o mañana antes de la tarde. en gijón no tengo ordenador.

el cartero dijo...

hola alejandro, soy nieves de cauce
escribo rápido voy co prisa. te escribí un comentario porque quería consejo para mañana y próximoas días en la snegra, pero no se que ha pasado. si lo has recibido te agracecería me respondieses

gracias.
un abrazo

el cartero dijo...

ah¡ ya he visto las letras verdes que dicen: comentario pendiente de aceptación. ¡no se puede ir con prisas a ningún lao
disculpa