20 noviembre 2006

Librería Negra y Criminal


El día que en El Periódico de Catalunya, en una pequeña sección realizada con motivo del año del comercio, Carlos Quílez (autor conocido por los amantes del género) nos invitaba a ir de compras precisamente a una calle de la Barceloneta, con sabor marino, el que suscribe realizaba su primera visita al lugar recomendado, Negra y Criminal.
Desde ese día, ya no soy la misma persona, tengo un segundo hogar, en el que siempre soy bienvenido, en el que se venden libros, pero que es tan grande el placer que me produce dicho lugar, que hasta última hora, cuando tienen que cerrar la tienda, tengo que realizar unos rápidos movimientos para realizar mis compras.
Desde que entro, por la puerta, Paco y Montse, te adoptan seas de la edad que seas, un fuerte abrazo, un beso, una invitación a un café, no es solo cortesía, es AMISTAD.
Siempre, existe tema de conversación, y como hablador que soy, no paro, y me percato de ello, cuando Paco, aparece con el vino, y posteriormente Montse, con los mejillones, eso los sábados.
Sábados inolvidables, en que te puedes encontrar a lectores interesantísimos, que explican historias fascinantes, que se combinan con las de Paco, y que cada uno va aportando su granito de arena, hasta convertirse en una gran fiesta, única en el mundo.
Puede pasar, como esta semana que a la hora del aperitivo, se presente Andreu Martín (otro de mis intocables) y Raúl Argemí, y entonces con perdón, es la reostia.
Librero-Autor-Lector, algo inimaginable en estos tiempos, y porque estoy que me salgo desde ese día, no he podido aguantar.
¿Merece la pena venir a Barcelona, solo para ir a la Librería Negra y Criminal?.
Sí y rotundo. Sabemos que hay autores extranjeros, que lo piensan, y yo no les llevo la contraria.
Felicidades a Paco y Montse, y por supuesto “Larga vida a Negra y Criminal”, mi librería favorita.

http://www.negraycriminal.com/

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